Un dilema de la Argentina de nuestros días, que debe agudizar la inteligencia y no la comodidad de los dirigentes políticos al frente de movimientos sociales, es cómo atender las necesidades más acuciantes sin hacer concesiones estratégicas al modelo económico que las genera y las reproduce.

Por Carlos Raimundi*

Mientras conducía mi automóvil camino a un Congreso de Filosofía y Geopolítica en la Universidad de Avellaneda, escuchaba un reportaje a Emilio Pérsico, el líder del Movimiento Evita, donde daba cuenta de los logros que había obtenido de la Ministra de Desarrollo Social de Macri –un oxímoron-   en favor de muchas familias muy humildes.

La Tecl@ Eñe convocó a diversas personalidades de la vida política, intelectual y jurídica, para analizar la más reciente aberración en materia de Derechos Humanos, impulsada por la Alianza Cambiemos: La consulta popular para decidir la libertad de Milagro Sala.

Texto y producción: Conrado Yasenza

Milagro Sala lleva once meses detenida en el penal del Alto Comedero. Milagro Sala es una presa política en la Argentina de la “revolución de la alegría”. Una presa personal del Leviatán Morales. El 16 de enero de 2016 su vivienda fue allanada por fuerzas policiales sin identificación, y Milagro, en una escena de dramatismo político no vista en 32 años de vida constitucional ininterrumpida, hizo pública, in situ, su detención a través de twitter. De allí en adelante, una tortuosa sucesión de hechos aberrantes buscaron quebrar física y psicológicamente a Milagro, uno de los símbolos de la organización popular.

La despedida del líder de la Revolución cubana evidenció el aislamiento de Argentina a nivel regional: líderes del mundo viajaron a La Habana, Cristina visitó la Embajada, pero la Cancillería argentina sólo publicó un comunicado de dos párrafos. Opina: Carlos Raimundi.

Por Héctor Bernardo

Millones de personas en todo el mundo dieron su adiós al comandante en jefe de la Revolución cubana, Fidel Castro Ruz. En La Habana, los cubanos colmaron la Plaza de la Revolución y la ancha avenida que va desde allí hasta el famoso malecón. Mandatarios de todo del mundo se acercaron a dar sus condolencias.

Así lo expresó en Contacto Sur edición vespertina el ex diputado argentino y especialista en temas internacionales Carlos Raimundi. El magnate Donald Trump ganó la elección y será el presidente de los Estados Unidos hasta 2021. A pesar de ser un hombre rico y poderoso no tenía el apoyo del poder financiero del país ni de los grandes medios de comunicación que apoyaron a Hillary Clinton.

Las declaraciones de la canciller argentina dejaron clara la preocupación del establishment mundial, ante la posibilidad de que el candidato republicano gane las elecciones. El monstruo que el poder económico concentrado creó ahora los aterroriza. Opinan: Carlos Raimundi y Jorge Kreyness.

Diario Contexto - Nov 3, 2016

Por Héctor Bernardo

La canciller argentina, Susana Malcorra, volvió a referirse a las elecciones en Estados Unidos. Una vez más, mostró su apoyo a la candidata demócrata Hillary Clinton y deslizó críticas al republicano Donald Trump.