El diputado nacional Carlos Raimundi (Frente para la Victoria) aseguró que el poder financiero y mediático busca "la desacreditación y el desprecio" del sistema electoral porque el objetivo final es que se instaure "un gobierno de empresas".


Raimundi afirmó que los recientes hechos registrados en Tucumán, tras la elección a gobernador que se hizo el pasado domingo 23 demuestran la intención de deslegitimar el sistema democrático y la elección de candidatos mediante el voto popular.


"Lo que pasó y pasa con Tucumán es la búsqueda de que la gente pase a desconfiar, a despreciar del propio acto electoral. Transformaron una elección con un resultado muy claro, con 14 o 15 puntos de ventaja, en una noticia de que votar es una porquería, ese es el mecanismo que están utilizando. Y creo que esta vez ni siquiera es para imponer políticas de mercado sino que es directamente para pasar a un gobierno de las empresas", dijo el legislador en una entrevista por Radio Noticias.


"Ahora -agregó Raimundi-, desde ese poder financiero cuestionan el sistema por el cual el gobierno se legitima, primero tratan de competir dentro de las reglas del sistema, cuando ven que no pueden desbancar al gobierno que no les gusta o no les favorece, cuestionan esas propias reglas. Es una forma blanda de dictadura: la de desconocer el voto popular".
El diputado explicó que esos episodios de desacreditación del voto popular no representan tan solo un intento desesperado de retornar al neoliberalismo de los años '90, entendido como la aplicación de medidas económicas en que el Estado cede su intervención en beneficio de los grupos económicos, sino que se trata de una nueva fase del capitalismo, "que busca situar geopolíticamente a los países latinos dentro de un marco de referencia de alcance global, signado por el gobierno de las empresas por sobre los Estados".

Derecha.
Raimundi detalló que en la Argentina ese poder está englobado dentro del denominado "círculo rojo" mientras que a nivel mundial "es un conglomerado que reúne al poder financiero, a las grandes cadenas de medios, las empresas petroleras y las empresas armamentistas".


"La derecha encontró en Mauricio Macri a un hombre propio, no tuvieron que cooptar a alguien, como ocurrió con (Carlos) Menem, que venía del sector nacional y popular y luego se vendió totalmente. Yo también creo que hoy el radicalismo como estructura, como partido político, ya pertenece a la derecha", analizó.
Raimundi, en tanto, aseveró que "hace mucho tiempo" se viene preparando en el país un clima de "desvalorización" de la política, "de que "la corrupción siempre pública y nunca privada, el desprestigio de sus líderes, para coronar derribando el corazón mismo del sistema, que es el momento electoral".

Nacionalizar.


"No en vano son los candidatos opositores los que, como palancas internas de ese poder transnacional, afirman que nuestro país debe acatar el fallo que favorece a los buitres. Los mismos que se regodean de ese profundo contrasentido que, cadenas mediáticas mediante, transforman un comicio con una clara diferencia entre el primero y el segundo, en un escenario de caos y represión, refrendado, lamentablemente, por una policía provincial cuya formación debe ser profundamente modificada", indicó.


Raimundi amplió que la presencia de Macri en Tucumán, "aun a sabiendas de lo abultada que sería su derrota, es la muestra más clara de que su objetivo era nacionalizar el cuestionamiento del acto electoral del 25 de octubre, que preanuncia su derrota".

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